Hoy día del trabajador es común que nos felicitemos por nuestro ahínco y nuestra dedicación en las labores que desempeñamos.
Si la cosa es así felicitaciones a todos, pero no estoy convencido que deba felicitar a todos, porque todos de una u otra forma trabajamos. Decía un tío mío que trabajar es tan maluco que hasta le pagan a uno por hacerlo.
Pero hay más el el Génesis, el mismísimo Yavé, es decir el chivo mayor del Universo, después de maldecir al hombre por haberse comido no se que cosa lo maldijo y le dijo: Te ganarás el pan con el sudor de tu frente, hasta que vuelvas a la misma tierra de la cual fuiste sacado. Porque polvo eres, y al polvo volverás."
Y eso no es todo, el gran filósofo español Raphael decía cantando: "Arrastrar la dura cadena, trabajar sin tregua y sin fin, es lo mismo que una condena, que ninguno puede eludir. El trabajo nace con la persona
va grabado sobre su piel..."
Así que no me vengan con el cuentico de "feliz día del trabajador." Imaginense que hay tanta ironía en esas palabras que los patronos y los gobiernos dan asueto a los trabajadores el primero de mayo para liberarlos aunque sea por un día de la tortura de trabajar.
Pero, de todas maneras les voy a decir un secreto: si en lugar de trabajar buscamos hacer lo que nos gusta, podemos ser productivos y felices al mismo tiempo. Se que para algunos ya es tarde, pensemos en ello para la hora del retiro y sobre todo para guiar a nuestros hijos por ese camino.
Con cariño para los que trabajan,
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