Bertolt Brecht
jueves, agosto 30, 2007
domingo, agosto 19, 2007
Nueva jornada laboral.
La solución a los problemas del país, segun la propuesta de reforma constitucional pasa por una nueva jornada de trabajo de 36 horas semanales. Es decir, trabajando mensos lograremos salir adelante.
Como pequeño empresario que vive la lucha diaria de sacar adelante una empresa, tratando de crear las mejores condiciones para quienes me colaboran como empleados,clientes o proveedores veo dificil que esto se pueda hacer realidad sin tocar los costos de producción.
El gobierno dice luchar contra la inflación, pero esta medida enmarcada dento de la reforma que trata de adecuar la Constitución Nacional al proyecto socialista de la Revolución Bolivariana que no niego tiene sus bondades, logrará, segun mi parecer, hacer exactamente lo contrario.
Por cierto, para mi gusto ese veinticinco por ciento de reducción de la jornada de trabajo seria mejor que se diese en vacaciones, así en lugar de tres semanas anuales los trabajadores podrían disfrutar de casi cuatro meses de vacaciones.
Como pequeño empresario que vive la lucha diaria de sacar adelante una empresa, tratando de crear las mejores condiciones para quienes me colaboran como empleados,clientes o proveedores veo dificil que esto se pueda hacer realidad sin tocar los costos de producción.
El gobierno dice luchar contra la inflación, pero esta medida enmarcada dento de la reforma que trata de adecuar la Constitución Nacional al proyecto socialista de la Revolución Bolivariana que no niego tiene sus bondades, logrará, segun mi parecer, hacer exactamente lo contrario.
Por cierto, para mi gusto ese veinticinco por ciento de reducción de la jornada de trabajo seria mejor que se diese en vacaciones, así en lugar de tres semanas anuales los trabajadores podrían disfrutar de casi cuatro meses de vacaciones.
Etiquetas:
Derecho,
Politica,
Socialismo del siglo XXI.,
Trabajo
jueves, agosto 09, 2007
El remedio:¿peor que la enfermedad?
Aveces el remedio es peor que la enfermedad. En los años noventa se diagnosticó que muchos de los males de la administración provenían de la alternabilidad de los partidos políticos que entre otras cosas dejaban las obras de sus antecesores comenzadas, cambiaban la filosofía, los nombres y los logotipos cada vez que había un cambio de gobierno, lo cual ocurría cada cinco años. En 1.999 la Constituyente introdujo la formula vigente alargando el periodo presidencial a seis años e introduciendo la posibilidad de reelección para un segundo periodo de seis años mas. En Colombia también se pensó en el mismo problema hace un par de años y el presidente Uribe impulsó una reforma constitucional que le dio la posibilidad de reelegirse por un segundo periodo, solo que en Colombia los periodos son de cuatro años, no de seis.
Obviamente los resultados en Colombia han sido provechosos, pues cuatro años es en realidad poco tiempo para desarrollar un programa de gobierno. En Venezuela no podemos decir que la situación sea diferente, pues el periodo de seis años mas dos que se añadieron como producto de la llamada refundación de la República. Decimos esto porque el programa de gobierno de el Presidente Chávez en casi diez años no termina de desarrollarse, lo que si se han desarrollado son los viejos vicios de la corrupción, el nepotismo, la exclusión de los opositores, la concentración del poder y el ventajismo en el sistema electoral.
Realmente la idea de alargar el periodo electoral complementada con el establecimiento del referéndum revocatorio no es mala, lo que ha resultado nefasto es el hecho de que por el descrédito de los viejos partidos políticos oposición y la falta de visión de los nuevos hayamos caído en una situación que tiene peligrosos visos de absolutismo en medio de una ineficiencia burocrática que impide el desarrollo de un proceso cada vez mas necesario que implemente la justicia social y la generación de bienestar para toda la comunidad.
Lo que si creemos es que la propuesta de reelección indefinida, continua o como quieran llamarla, poco contribuirá para desarrollar un Estado moderno y una sociedad en los que los valores de la libertad, la solidaridad y perfectibilidad del sistema democrático. Tampoco podemos negar es que el liderazgo del Presidente de la República se ha mantenido incólume y ni dentro o fura de su plataforma política ha surgido un liderazgo individual o colectivo comparable al suyo y lo que es mas grave aún nadie ha sido capaz de desrrollar una propuesta de país que sea capaz de superar en popularida la que ha vendido el gobierno.
Etiquetas:
Chávez.,
Colombia,
Politica,
Socialismo del siglo XXI.,
Venezuela
sábado, agosto 04, 2007
Un paso atrás.
En los años ochenta cuando aparecieron las primeras antenas parabólicas en el paisaje urbano se dio un paso gigante hacia lo que es el mundo que hoy conocemos. Marsall Macluhan había acuñado años atrás el término “aldea global” el cual se hizo realidad gracias a las trasmisiones de televisión, radio, teléfono y datos a nivel mundial gracias a la tecnología satelital y a la fibra óptica.
Desafortunadamente la diatriba política en Venezuela nos ha llevado a un punto el cual el Estado comienza a cuestionar las bondades de la libertad de los ciudadanos a acceder a la información que se trasmite por satélite y por cable. No dudamos que algunos medios han usado su poder para ejercer su influencia en los usuarios, de hecho si vamos al fondo nos encontraremos siempre con que todos los medios tienen como fin ultimo llegar hasta su audiencia con determinados mensajes.
Todas las legislaciones ciertamente tienen normas civiles y penales para controlar de alguna manera los mensajes perjudiciales, insidiosos o atentatorios contra los derechos de terceros. La aplicación de estas normas a veces se hace difícil por el hecho de ser internacionales las empresas que las trasmiten, pero siempre habrá manera de hacerlo.
Pensar que simplemente creando legislaciones nacionales que impidan la recepción de ciertos mensajes es un retroceso de décadas en el avance de la civilización, es algo así como prohibir los automóviles por ser contaminantes o el uso de la energía eléctrica por razones de alguna índole. Los ciudadanos debemos estar atentos ante el intento de coartar la libertad de acceder a la información, pues cualquier limitación que se ponga a ello repercutirá negativamente en la formación de nuestros hijos y en nuestra propia capacidad para competir a nivel global en el difícil mundo laboral del siglo XXI.
Desafortunadamente la diatriba política en Venezuela nos ha llevado a un punto el cual el Estado comienza a cuestionar las bondades de la libertad de los ciudadanos a acceder a la información que se trasmite por satélite y por cable. No dudamos que algunos medios han usado su poder para ejercer su influencia en los usuarios, de hecho si vamos al fondo nos encontraremos siempre con que todos los medios tienen como fin ultimo llegar hasta su audiencia con determinados mensajes.
Todas las legislaciones ciertamente tienen normas civiles y penales para controlar de alguna manera los mensajes perjudiciales, insidiosos o atentatorios contra los derechos de terceros. La aplicación de estas normas a veces se hace difícil por el hecho de ser internacionales las empresas que las trasmiten, pero siempre habrá manera de hacerlo.
Pensar que simplemente creando legislaciones nacionales que impidan la recepción de ciertos mensajes es un retroceso de décadas en el avance de la civilización, es algo así como prohibir los automóviles por ser contaminantes o el uso de la energía eléctrica por razones de alguna índole. Los ciudadanos debemos estar atentos ante el intento de coartar la libertad de acceder a la información, pues cualquier limitación que se ponga a ello repercutirá negativamente en la formación de nuestros hijos y en nuestra propia capacidad para competir a nivel global en el difícil mundo laboral del siglo XXI.
Etiquetas:
Comunismo,
Informática,
RCTV,
Tecnología,
Televisión,
Venezuela
jueves, agosto 02, 2007
La decisión del TSJ sobre RCTV
Hoy tenemos todavía a RCTV en el cable después de que un amparo constitucional fuera introducido ante el Tribunal Supremo de Justicia por el representante de la asociación de empresas de televisión por suscripción pidiendo dejar sin efecto una resolución de el Ministerio del Poder Popular para las Telecomunicaciones que habia puesto un plazo perentorio n hasta las doce de la noche del día de ayer para que ese canal cumpliera con ciertas formalidades que le sujetarían a la legislación vigente para los canales nacionales.
No conocemos el fondo de la solicitud y menos el de la decisión del TSJ, pero nos causa sorpresa que el amparo fue introducido el día de ayer a finales de la mañana y antes de las siete de la noche ya había una decisión que echa para atrás lo dispuesto por el MPPPT, manteniendo en el aire a RCTV, esto crea también algunas suspicacias, pues el TSJ ha demostrado en los últimos tiempos una consistente coincidencia con las decisiones gubernamentales en virtud de una manifiesta solidaridad con el proceso revolucionario. No creemos que el gobierno se conforme con reconocer el error jurídico y permita a RCTV actuar como un canal internacional como lo ha pretendido.
Es factible que el próximo capitulo de esta saga traiga una reforma a la legislación para poder impedir que las trasmisiones de ese canal sigan llegando a la población venezolana por los canales de suscripción, lo cual traería como consecuencia que una buena parte de los canales de cable tuviesen que sujetarse a las normas nacionales con lo cual se estaría dando un gigantesco paso en el proyecto de hegemonía comunicacional de la revolución de Chávez. Otra posibilidad es que la decisión, posiblemente interlocutoria y de efectos provisionales sea revisada dentro del curso normal del proceso judicial o a instancia del gobierno.
Si la decisión se mantiene sin afectar a RCTV y el gobierno desiste de modificar las leyes estaríamos en presencia de una demostración de tolerancia del gobierno con uno de sus contendores mas visibles en los últimos tiempos, lo cual parece difícil pero no imposible, pues esto lavaría en cierta manera la imagen internacional del mandatario Venezolano que sufrió un descenso con la no renovación de la concesión del canal de Barcenas, el cierre definitivo de RCTV dependerá entonces de que con el transcurso del tiempo se convierta en un verdadero canal internacional en el cual la critica al proceso bolivariano no sea la columna vertebral de sus informativos.
Etiquetas:
Derecho,
RCTV,
Revolución,
Televisión
Suscribirse a:
Entradas (Atom)