Las próximas elecciones regionales amenazan con no ser todo lo limpias que se requieren. Nuevamente vemos como el excesivo poder del oficialismo está siendo utilizado para favorecer al PSUV. Las inhabilitaciones del contralor han sido ya apoyadas por el Presidente de la República y ya sabemos lo que so significa, el registro electoral no ha sido depurado después de varios años de denuncia, los medio oficiales siguen siendo usados sin medida para la campaña electoral de los candidatos del gobierno, al igual que los bienes y recursos del Estado. El gobierno no está dispuesto a ceder posiciones y se la jugará hará todo lo que esté a su alcance para mantenerlas. Esto debe ser entendido por la oposición a la hora de construir estratégicas para conquistar los puestos que carentemente el electorado está dispuesto a cederle, de no ser así el pluralismo seguirá siendo un sueño de los venezolanos.
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