Los secuestrados de Venezuela son de tercera.

Para quienes no lo sabían, no todos los secuestrados de las FARC son iguales `para sus secuestradores ni para quienes pretenden liberarlos. Hay secuestrados políticos, que no es lo mismo que políticos secuestrados, hay policías secuestrados, hay militares secuestrados y hay victimas del secuestro extorsivo, esto es aquellos quienes son privados de la libertad para exigir un rescate por su libertad.

No sabemos si el secuestro político persigue algún tipo de contraprestación económica, nos imaginamos que sí es, pero el fin de este tipo de secuestro es mas macabro, es hacer justicia por manos propias apelando a códigos no oficiales y la discreción de los secuestradores; algunos, como los nueve concejales ejecutados el año pasado son víctimas de la pena de muerte impuesta por sus captores utilizando métodos sanguinarios y otros permanecen encadenados, como relataron los liberados a comienzo de este año.

Los secuestrados por razones meramente económicas, es decir para financiar las actividades guerrilleras son liberados después de largas negociaciones en las que se somete a los secuestrados y a sus familias de estos a una guerra sicológica en la cual la amenaza de muerte es el arma mas frecuente, normalmente estos procesos duran meses y a veces hasta años, en otras palabras los guerrilleros tienen suficiente paciencia para lograr procurarse un buen botín.

La existencia de los dos tipos de secuestrados hace que existan secuestrados de primera, de segunda y de tercera categoría. Los de primera son los políticos, quienes no gozan de ningún privilegio especial, pero que son sujetos de negociación para canje de prisioneros, para hacer presión política para la promulgación de leyes y para evitar la extradición de presos políticos a países en los cuales las penas pudieran ser hasta de muerte, en este grupo se encuentran los extranjeros, miembros de misiones internacionales o empleados de multinacionales que caen en manos de las guerrillas, los de segunda son los policías y militares que son secuestrados, mas no tratados como prisioneros de guerra, son también objeto de canje por irregulares capturados en combate y obviamente los de tercera son las víctimas del secuestro extorsivo.

El canje humanitario se plantea en primer lugar para los secuestrados políticos y en segundo para los policías y militares, las victimas del secuestro extorsivo han sido, hasta ahora excluidos de este tipo de acuerdos y aunque las leyes colombianas castigan a quienes pagan los rescates, solo se deja para ellos dos alternativas: la huida o la liberación por parte de las autoridades, pero en la práctica lo normal es que terminen pagando el rescate, convirtiéndoles no solo en victimas del crimen, sino técnicamente en cómplices de los victimarios.

En Venezuela las victimas del secuestro, lo son con fines extorsivos, lo cual convierte a nuestros secuestrados en de tercera categoría, esa es la razón por la cual estos no son sujetos de acuerdos con la guerrilla, mientras los secuestrados de primera, todos extranjeros, son parte de una estrategia política y publicitaria que involucra a gobiernos y grupos irregulares.