La ineficiencia es una característica de nuestros días, sobretodo si la eficiencia esperada viene de los órganos del Estado. Desde agosto del año pasado, por ejemplo, vengo teniendo problemas para conseguir azucar, que es una de las materias primas mas importantes en la industria que manejo, el precio está regulado a tres mil bolívares, pero desde esa fecha ha sido imposible que la regulación sea respetada, incluso en el Acentral Azucarero Táchira, cuando la conseguía me la vendían al precio regulado mas el IVA, además debía pagar quinientos bolívares por saco de cincuenta kilos y otros dos mil gastos de transporte, esto hasta que alguien descubrió que lo que estaba regulada era el azucar refinada y comenzaron a vender azúcar lavada a precios que llegaron hasta los tres mil seiscientos bolívares el kilo. Actualmente consigo azúcar lavada, que es de inferior calidad a un mil novecientos bolívares y otra que es muy parecida al refinada y a la que le dicen blanca, muy probablemente es una mezcla de las dos a dos mil doscientos bolívares el kilo. Lo mismo ha pasado con el queso semiduro, regulado a ocho mil novecientos bolívares el kilo, se consigue a diecinueve mil novecientos bajo el nombre de Palmita o Light. Los huevos se están vendiendo al doble del precio y desde ayer explotó el mismo problema con la carne.
Hablando de ineficiencia hoy me llegó la tarjeta de navidad de Dirctv, la enviaron por Ipostel el 18 de enero fue recibida en San Cristóbal el 31 de enero y le la entregó el portero del edificio el siete de febrero ¡Feliz Navidad! Para los empleados de Directv, Ipostel y a los porteros del Ciudad de Nutrias aunque sea casi carnaval.
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