miércoles, octubre 03, 2007

La propiedad privada, por ahora.

La propiedad privada siempre ha existido y siempre existirá. El cepillo de dientes, los zapatos, las medias y la ropa interior siempre han sido objeto y lo seguirán siendo de este derecho; Sin embargo, se cuestiona que en una sociedad socialista los medios de producción puedan llegar a ser objeto de propiedad, pues la teoría marxista se fundamenta en la ilegitimidad de la apropiación de las rentas o beneficios económicos producidos por la explotación de esos medios de producción en el entendido de que estos son operados por terceros a quienes no se les reconoce su parte de los beneficios en su justa proporción.

La propuesta de reforma de la Constitución venezolana de 1.999 reconoce la propiedad privada sobre los medios de producción “legítimamente adquiridos”. Sin ir muy lejos en lo que se quiere decir con “legítimamente adquiridos” debemos decir que en la nueva teoría del Socialismo del Siglo XXI la propiedad privada sobre ciertos medios de producción ha de reconocerse en la llamada fase de transición, de hecho estados que habían erradicado casi por completo la propiedad privada sobre los medios de producción han abierto sus puertas a la propiedad privada en loas ultimas tres décadas. En China, por ejemplo, se están experimentando cambios que hacen suponer que hay una tendencia hacia un retroceso hacia el capitalismo, mientras en Cuba en sectores como el turismo se ha permitido la inversión extranjera y se está abriendo así campo a la propiedad privada.

La fase de transición a la que se refieren los teóricos del nuevo socialismo, en la cual la propiedad privada puede existir, es nada menos que una fase previa a la globalización de la revolución socialista. Los autores que defiende este tema ven la necesidad de permitir en los países que están construyendo el sl socialismo de permitir la inversión extranjera y las alianzas de los empresarios locales para poder ingresar a los mercados extranjeros y evitar el aislamiento que repercutiría necesariamente en un asfixiamiento de las economías socialistas.

La pregunta que surge es si con el reconocimiento de la necesidad de un esquela de propiedad propio del capitalismo no se está reconociendo la eficiencia de este último sistema para producir los bienes y servicios que le proveen bienestar a la sociedad. Aquí habría que entrar en el tema de las desigualdades sociales existentes en la sociedad capitalista , pero ese es el punto. La inquietud que nos ocupa es la posibilidad de la coexistencia de la propiedad privada con el socialismo y en base a lo expuesto la respuesta es simple: si puede coexistir la propiedad privada de los medios de producción en una fase previa al socialismo, pero al llegarse a materializar una sociedead verdaderamente socialista esta forma deberá desaparecer para dar paso a formas de propiedad colectiva.

Esto traducido a la realidad qui vive Venezuela quiere decir que la propiedad privada de los medios de producción subsistirá, pero considerada como un mal necesario que con el transcurso del tiempo debe erradicarse. Por eso no debe extrañarnos que la reforma constitucional reconozca la propiedad privada de los medios de producción con todos sus atributos, por ahora, como diria el comandante.

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