El gobierno de Uribe había ofrecido cinco millones de dólares de recompensa a quien diera noticias del paradero de Raúl Reyes, lo que quiere decir que no conocia su paradero. Lo sorprendente del caso es que ahora resulta que todo el mundo se reunía con el y mantenían una relación muy fluida vía e-mail y por teléfono satelital. Ayer escuche al presidente del Partido Comunista de Argentina echándole a Pedro Penzini los cuentos de sus reuniones en la selva con el comandante guerrillero, el canciller de Ecuador se reunió con el para hablar del acuerdo humanitario, Piedad Córdoba aparece en varios videos en plan de amapuches con el guerrillero, Ortega en su discurso en República Dominicana habla de sus visitas al campamento de su “hermano Raúl, de Rodríguez Chacín ni hablar. Todos sabían, todos despreciaron los cinco millones, o quizá no.
Mientras en la cumbre de Santo Domingo los presidentes de Colombia y Ecuador se lanzan acusaciones recíprocas, se anuncia que en territorio colombiano fue abatido otro miembro del secretariado de las Farc, Iván Rios, y por otro lado el canciller del Ecuador afirma que Ingrid Betancourt y once secuestrados mas, incluidos los tres norteamericanos, serán liberados en los próximas horas.
Por su parte Fidel Castro ha vuelto a opinar diciendo esta vez que el imperio quiere hacer con Chávez lo que se hizo con Milosevic después de la guerra genocida de Kosovo.
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