La atención a veces no puede fijarse en el análisis por la velocidad en la que las cosas ocurren, eso precisamente fue lo que sucedió ayer, un día lleno de noticias originadas por el desarrollo de los sucesos de los últimos días y por algún nuevo escándalo que saló a la luz publica.
Lo lógico hubiera sido que los medios se concentraran en la visita de José Miguel Insulza al lugar del ataque en el cual le dieron muerte a Raúl Reyes, pero eso quedó en segundo plano ante el movimiento militar alrededor de una clínica privada de la `población fronteriza de Rubio donde estaría hospitalizado con una herida en la cara el reemplazo de Raúl Reyes, finamente se comprobó que el paciente no era el nuevo miembro del secretariado de las FARC, aunque no falta quien dude que hayan escondido al verdadero protagonista de los hechos.
En el campo de la política norteamericana, por otra parte, no fue poco el centimetraje que le quito un escándalo de prostitución que involucra al gobernador de Nueva York al triunfo de Barak Obama en las primarias de Mississippi después de que Hill Clinton le ofreciera la candidatura a la vicepresidencia en fórmula con su esposa Hillary.
En Colombia la decisión de pagarle la recompensa de cinco mil millones de pesos, mas de dos millones de dólares, al guerrilleo alias Rojas quien ,mató y entregó como prueba de ello a las autoridades la mano de Iván Ríos, comandante de un frente de la FARC y miembro del secretariado le quitó protagonismo al gran concierto por la paz que promovió el cantante Juanes y cuya fecha se cambió para el próximo domingo dieciséis en el puente que une a las ciudades de San Antonio y Cúcuta en la frontera entre Venezuela y Colombia.
Los hechos se producen a una velocidad inusitada, a veces pareciera que no tenemos oportunidad de asimilarlos y peor aun nos distraen de los procesos que se vienen dando en nuestros piases, por ejemplo las próximas elecciones en Venezuela, el proceso constituyente de Ecuador, la situación del gobierno de Colombia en la guerra contra las FARC y la situación de los secuestrados en ese marco.
No queremos pensar que tantos sucesos espectaculares sean presagio de situaciones peores mucho mas graves que pudieran producirse en este año bisiesto que hasta ahora ha sido uno de los mas intensos desde que tengo memoria, superado quizá por 2002, cuando se produjeron el paro y el golpe en Venezuela.
Lo lógico hubiera sido que los medios se concentraran en la visita de José Miguel Insulza al lugar del ataque en el cual le dieron muerte a Raúl Reyes, pero eso quedó en segundo plano ante el movimiento militar alrededor de una clínica privada de la `población fronteriza de Rubio donde estaría hospitalizado con una herida en la cara el reemplazo de Raúl Reyes, finamente se comprobó que el paciente no era el nuevo miembro del secretariado de las FARC, aunque no falta quien dude que hayan escondido al verdadero protagonista de los hechos.
En el campo de la política norteamericana, por otra parte, no fue poco el centimetraje que le quito un escándalo de prostitución que involucra al gobernador de Nueva York al triunfo de Barak Obama en las primarias de Mississippi después de que Hill Clinton le ofreciera la candidatura a la vicepresidencia en fórmula con su esposa Hillary.
En Colombia la decisión de pagarle la recompensa de cinco mil millones de pesos, mas de dos millones de dólares, al guerrilleo alias Rojas quien ,mató y entregó como prueba de ello a las autoridades la mano de Iván Ríos, comandante de un frente de la FARC y miembro del secretariado le quitó protagonismo al gran concierto por la paz que promovió el cantante Juanes y cuya fecha se cambió para el próximo domingo dieciséis en el puente que une a las ciudades de San Antonio y Cúcuta en la frontera entre Venezuela y Colombia.
Los hechos se producen a una velocidad inusitada, a veces pareciera que no tenemos oportunidad de asimilarlos y peor aun nos distraen de los procesos que se vienen dando en nuestros piases, por ejemplo las próximas elecciones en Venezuela, el proceso constituyente de Ecuador, la situación del gobierno de Colombia en la guerra contra las FARC y la situación de los secuestrados en ese marco.
No queremos pensar que tantos sucesos espectaculares sean presagio de situaciones peores mucho mas graves que pudieran producirse en este año bisiesto que hasta ahora ha sido uno de los mas intensos desde que tengo memoria, superado quizá por 2002, cuando se produjeron el paro y el golpe en Venezuela.
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